JOVENES RURALES EMPREDEDORES - CENTRO INDUSTRIAL Y DEL DESARROLLO TECNOLOGICO DE BARRANCABERMEJA
viernes, 30 de abril de 2010
NECTARIOS EXTRAFLORALES
NECTARIOS EXTRAFLORALES
Plantas e insectos conviven desde hace millones de años, y con el tiempo desarrollaron adaptaciones mutuas evolutivas de diferente índole, siendo quizás la más significativa, el desarrollo de flores, para que los insectos puedan realizar la polinización a cambio de una recompensa alimentaria, sea en forma de polen o de néctar. Antes de este desarrollo, las plantas confiaban en el viento para esta tarea, tal como lo hacen actualmente los pinos.
Las flores son hojas modificadas con colores y aromas que les permiten distinguir a los insectos donde se encuentran, y estos al visitarlas contribuyen al desplazamiento del gametofito masculino: el polen siendo entonces vectores para la fecundación. Esto permitió potenciar las capacidades reproductivas de las plantas, y las alimentarias de los insectos, sinergiando toda la biota.
Los nectarios están ubicados estratégicamente de manera que los insectos al pasar a buscar su recompensa queden cargados de polen.
Estas adaptaciones, fueron produciendo en una variedad de formas, colores y especializaciones tanto por parte de las plantas como de los insectos, dando lugar a una biodiversidad interrelacionada de una riqueza asombrosa.
El néctar que es una solución de sacarosa, fructuosa y glucosa, con aminoácidos y minerales constituye la base energética alimentaria de colibríes y muchas especies insectos. Este es apreciado por muchas especies de hormigas, pero estas no son buenas polinizadoras debido a su exoesqueleto bastante liso (el cual retiene poco polen) y debido a su pequeño tamaño.
Pero ciertas clases de plantas que se veían asediadas por devoradores de hojas tales como orugas de lepidópteros y otros, aprovecharon la afinidad de las hormigas por el néctar como una estrategia defensiva. A través del desarrollo de estructuras específicas de producción de néctar en hojas y tallos, que se denominan nectarios extra florales, mantienen a las hormigas recorriendo regularmente la planta, y ahuyentando a insectos e incluso a mamíferos, en el afán de proteger su fuente de néctar. Como se ve, no siempre plantas y hormigas suelen ser antagónicas, tal como suele pensarse.
La vida siempre se potencia así misma a través de la biodiversidad y de la sinergia que produce. Nosotros como humanos, atentamos irresponsablemente contra esta, sin entender, que estamos acabando con la riqueza que sustenta la vida toda.
En la secuencia de fotos de abajo, podemos apreciar un detalle de los nectarios, y la visita de otra especie de hormiga más pequeña que la anterior al mismo.
Plantas e insectos conviven desde hace millones de años, y con el tiempo desarrollaron adaptaciones mutuas evolutivas de diferente índole, siendo quizás la más significativa, el desarrollo de flores, para que los insectos puedan realizar la polinización a cambio de una recompensa alimentaria, sea en forma de polen o de néctar. Antes de este desarrollo, las plantas confiaban en el viento para esta tarea, tal como lo hacen actualmente los pinos.
Las flores son hojas modificadas con colores y aromas que les permiten distinguir a los insectos donde se encuentran, y estos al visitarlas contribuyen al desplazamiento del gametofito masculino: el polen siendo entonces vectores para la fecundación. Esto permitió potenciar las capacidades reproductivas de las plantas, y las alimentarias de los insectos, sinergiando toda la biota.
Los nectarios están ubicados estratégicamente de manera que los insectos al pasar a buscar su recompensa queden cargados de polen.
Estas adaptaciones, fueron produciendo en una variedad de formas, colores y especializaciones tanto por parte de las plantas como de los insectos, dando lugar a una biodiversidad interrelacionada de una riqueza asombrosa.
El néctar que es una solución de sacarosa, fructuosa y glucosa, con aminoácidos y minerales constituye la base energética alimentaria de colibríes y muchas especies insectos. Este es apreciado por muchas especies de hormigas, pero estas no son buenas polinizadoras debido a su exoesqueleto bastante liso (el cual retiene poco polen) y debido a su pequeño tamaño.
Pero ciertas clases de plantas que se veían asediadas por devoradores de hojas tales como orugas de lepidópteros y otros, aprovecharon la afinidad de las hormigas por el néctar como una estrategia defensiva. A través del desarrollo de estructuras específicas de producción de néctar en hojas y tallos, que se denominan nectarios extra florales, mantienen a las hormigas recorriendo regularmente la planta, y ahuyentando a insectos e incluso a mamíferos, en el afán de proteger su fuente de néctar. Como se ve, no siempre plantas y hormigas suelen ser antagónicas, tal como suele pensarse.
La vida siempre se potencia así misma a través de la biodiversidad y de la sinergia que produce. Nosotros como humanos, atentamos irresponsablemente contra esta, sin entender, que estamos acabando con la riqueza que sustenta la vida toda.
En la secuencia de fotos de abajo, podemos apreciar un detalle de los nectarios, y la visita de otra especie de hormiga más pequeña que la anterior al mismo.
miércoles, 28 de abril de 2010
domingo, 25 de abril de 2010
PREPARACIÓN DEL SEMILLERO.
PREPARACIÓN DEL SEMILLERO.
Para prepara un semillero, necesitamos un recipiente que haga las veces de semillero, sustrato previamente preparado, las semillas que queramos plantar, ten en cuenta que hay semillas que precisan de un periodo de letargo invernal, normalmente las más grande que pertenezcan a climas fríos como las de roble o encina, o las de cascara mas dura que necesita un tiempo para descomponer parte de su cascara, así que si las has recogido en un campo o bosque cercano en otoño, lo más probable es que no germinen hasta primavera o incluso hasta el año siguiente, plántalas y déjalas fuera de casa con una fina capa de hojas muertas que las protegerán de las posibles heladas. Si las semillas las has comprado en alguna semilleria, es aconsejable plantarlas en los primeros días de la primavera, el calor del sol hará que germinen rápidamente y su crecimiento será rápido, probablemente en el paquete os dirá la fecha exacta en la que es aconsejable plantarlas. También necesitaremos un cubo lleno de agua, y un lugar donde poner nuestro pequeño laboratorio.
Ya tenemos los materiales que necesitamos así que manos a la obra. Supongamos que las semillas las has comprado o obtenido de cualquier otro modo, y que además estamos en esos preciosos días que anuncian un maravilloso verano. Lo primero que debes hacer es preparar el sustrato, os aconsejo que tengáis a mano un poco de grava o arena de río, que vamos a utilizar para aumentar la capacidad de drenaje de nuestro semillero. Deposita la arena o gravilla en el fondo, que debe tener al menos tres orificios para que nuestro semillero no se encharque, será suficiente con unos 5 mm de grava. Sobre la grava depositaremos el sustrato hasta llenar el recipiente, apretando bien la tierra. Las semillas pueden ser enterradas haciendo un orificio, no más profundo que el diámetro de la semilla, e introduciendo una o dos en cada orificio, o bien depositandolas sobre la superficie del sustrato y cubiertas por una fina capa del mismo.
Una vez preparado el semillero ya solo queda regarlo. Pare ello lo introduciremos, justo hasta el borde, en el cubo que teníamos lleno de agua y lo mantendremos así hasta que la superficie cambie su tonalidad aun color más oscuro. Tendrás que vigilar que la tierra no se seque por completo, esto no quiere decir que estés todo el día regándolo pues el exceso de humedad es tan malo como la falta.
Un buen truco para que las semillas germinen antes es dejarlas 12 horas en un recipiente con agua justo antes de sembrarlas.
Para prepara un semillero, necesitamos un recipiente que haga las veces de semillero, sustrato previamente preparado, las semillas que queramos plantar, ten en cuenta que hay semillas que precisan de un periodo de letargo invernal, normalmente las más grande que pertenezcan a climas fríos como las de roble o encina, o las de cascara mas dura que necesita un tiempo para descomponer parte de su cascara, así que si las has recogido en un campo o bosque cercano en otoño, lo más probable es que no germinen hasta primavera o incluso hasta el año siguiente, plántalas y déjalas fuera de casa con una fina capa de hojas muertas que las protegerán de las posibles heladas. Si las semillas las has comprado en alguna semilleria, es aconsejable plantarlas en los primeros días de la primavera, el calor del sol hará que germinen rápidamente y su crecimiento será rápido, probablemente en el paquete os dirá la fecha exacta en la que es aconsejable plantarlas. También necesitaremos un cubo lleno de agua, y un lugar donde poner nuestro pequeño laboratorio.
Ya tenemos los materiales que necesitamos así que manos a la obra. Supongamos que las semillas las has comprado o obtenido de cualquier otro modo, y que además estamos en esos preciosos días que anuncian un maravilloso verano. Lo primero que debes hacer es preparar el sustrato, os aconsejo que tengáis a mano un poco de grava o arena de río, que vamos a utilizar para aumentar la capacidad de drenaje de nuestro semillero. Deposita la arena o gravilla en el fondo, que debe tener al menos tres orificios para que nuestro semillero no se encharque, será suficiente con unos 5 mm de grava. Sobre la grava depositaremos el sustrato hasta llenar el recipiente, apretando bien la tierra. Las semillas pueden ser enterradas haciendo un orificio, no más profundo que el diámetro de la semilla, e introduciendo una o dos en cada orificio, o bien depositandolas sobre la superficie del sustrato y cubiertas por una fina capa del mismo.
Una vez preparado el semillero ya solo queda regarlo. Pare ello lo introduciremos, justo hasta el borde, en el cubo que teníamos lleno de agua y lo mantendremos así hasta que la superficie cambie su tonalidad aun color más oscuro. Tendrás que vigilar que la tierra no se seque por completo, esto no quiere decir que estés todo el día regándolo pues el exceso de humedad es tan malo como la falta.
Un buen truco para que las semillas germinen antes es dejarlas 12 horas en un recipiente con agua justo antes de sembrarlas.
SEMILLEROS EN LAS PAMPAS
SEMILLEROS EN EL SUELO
Los semilleros se pueden hacer en recipientes, por ejemplo, bandejas de alveolos de corcho, o directamente en la tierra.
Los semilleros en tierra tienen la ventaja de que se dispone de mayor espacio en la amplitud de un trozo del huerto, pero también algunos inconvenientes:
1. La germinación de malas hierbas es molesta y hay que andar arrancándolas con mucho cuidado de no llevarnos todo, la mala hierba y la hortaliza.
2. El semillero en suelo puede requerir de protección del frío (heladas) con plástico, ya que tenemos que tener en cuenta que muchos de estos planteles se realizan durante el invierno y principios de primavera.
3. Cuando ya estén listas las plantitas, hay que arrancar de raíz y sufren mucho más que de una bandeja de alveolos, donde sale el cepellón intacto. Habrá más marras y los primeros días tras plantar en el huerto da la sensación de que estén muertas. No hay que alarmarse porque en 2 ó 3 días deberían recuperar su turgencia.
El semillero en tierra se emplea más por los viveristas profesionales que necesitan sacar miles de plantones de ciertos cultivos para vender a los horticultores y destinan a ello parcelas enteras como semillero.
PREPARACIÓN DEL TERRENO
Delimita una parcelita para hacer el semillero.
Hace falta un suelo muy bueno, esponjoso y suelto para que se produzca una buena germinación de las semillas.
Labra e incorpora compost, estiércol, humus de lombriz u otro abono orgánico de calidad mezclándolo homogéneamente con la tierra, puesto que las acumulaciones de abono podrían quemar las raicillas delicadas de las plantitas.
SIEMBRA
Para sembrar espera a que la tierra esté algo húmeda y muy disgregada.
Siembra en líneas o a voleo.
A voleo (esparcidas uniformemente por la superficie) se hace en bandas estrecha que permite llegar hasta el centro sin tener que pisar para quitar malas hierbas. La densidad de planta será elevada (800-1000 plantas/m2).
En líneas consiste en esparcir las semillas a lo largo de surcos o bien a puñaditos a cierta distancia unos de otros. Los surcos se hacen rectos tomando la guía de una cuerda y un par de estacas o gavillas.
Los semilleros se pueden hacer en recipientes, por ejemplo, bandejas de alveolos de corcho, o directamente en la tierra.
Los semilleros en tierra tienen la ventaja de que se dispone de mayor espacio en la amplitud de un trozo del huerto, pero también algunos inconvenientes:
1. La germinación de malas hierbas es molesta y hay que andar arrancándolas con mucho cuidado de no llevarnos todo, la mala hierba y la hortaliza.
2. El semillero en suelo puede requerir de protección del frío (heladas) con plástico, ya que tenemos que tener en cuenta que muchos de estos planteles se realizan durante el invierno y principios de primavera.
3. Cuando ya estén listas las plantitas, hay que arrancar de raíz y sufren mucho más que de una bandeja de alveolos, donde sale el cepellón intacto. Habrá más marras y los primeros días tras plantar en el huerto da la sensación de que estén muertas. No hay que alarmarse porque en 2 ó 3 días deberían recuperar su turgencia.
El semillero en tierra se emplea más por los viveristas profesionales que necesitan sacar miles de plantones de ciertos cultivos para vender a los horticultores y destinan a ello parcelas enteras como semillero.
PREPARACIÓN DEL TERRENO
Delimita una parcelita para hacer el semillero.
Hace falta un suelo muy bueno, esponjoso y suelto para que se produzca una buena germinación de las semillas.
Labra e incorpora compost, estiércol, humus de lombriz u otro abono orgánico de calidad mezclándolo homogéneamente con la tierra, puesto que las acumulaciones de abono podrían quemar las raicillas delicadas de las plantitas.
SIEMBRA
Para sembrar espera a que la tierra esté algo húmeda y muy disgregada.
Siembra en líneas o a voleo.
A voleo (esparcidas uniformemente por la superficie) se hace en bandas estrecha que permite llegar hasta el centro sin tener que pisar para quitar malas hierbas. La densidad de planta será elevada (800-1000 plantas/m2).
En líneas consiste en esparcir las semillas a lo largo de surcos o bien a puñaditos a cierta distancia unos de otros. Los surcos se hacen rectos tomando la guía de una cuerda y un par de estacas o gavillas.
jueves, 8 de abril de 2010
NECTARIFERAS
EL DÍA 6 DE ABRIL SE LLEVO A CABO REUNIÓN EL MUNICIPIO DE SABANA DE TORRES EN LA SEDE DE PROGRAMA DE DESARROLLO Y PAZ. PARA DAR INICIO AL CURSO DE NECTARÍFERAS. EN EL VAN ASISTIR TANTO AGRICULTORES COMO ESTUDIANTES.
CHARLA A INUPAZ
EL DÍA 25 DE MARZO DE 2010 QUE SE LLEVO A CABO EN LA BIBLIOTECA ALEJANDRO GALVIS GALVIS SE REALIZO ACOMPAÑAMIENTO A LA CHARLA SOLICITADO POR EL ING. ARNALDO CHIQUILLO; LA CUAL TENÍA COMO OBJETIVO LA IMPORTANCIA DEL INGENIERO AGRÓNOMO EN ÁMBITO LABORAL, LA LABOR QUE DESARROLLA LA INSTITUCIÓN Y PROYECTOS QUE ACTUALMENTE SE COORDINAN PARA EL SECTOR AGRÍCOLA.
LA CHARLA SE LLEVO A CABO CON EL ESTUDIANTES DE 9 SEMESTRE DE INGENIERA AGRONÓMICA
LA CHARLA SE LLEVO A CABO CON EL ESTUDIANTES DE 9 SEMESTRE DE INGENIERA AGRONÓMICA
Suscribirse a:
Entradas (Atom)