JOVENES RURALES EMPREDEDORES - CENTRO INDUSTRIAL Y DEL DESARROLLO TECNOLOGICO DE BARRANCABERMEJA
jueves, 24 de junio de 2010
martes, 22 de junio de 2010
SUSTRATO PARA VIVVERO
RECOLECCIÓN DE SUELO MICORRÍCICO. PREPARACIÓN DE SUSTRATOS
Introducción
Excepcionalmente, puede ser interesante recurrir a las fuentes de inóculo existentes en la naturaleza. En suelos forestales crecen gran cantidad de hongos ectomicorrícicos, mientras que en pastizales, jarales... abundan las hongos endomicorrícicos. La utilización de “suelo de campo” como inóculo nos proporciona una elevada probabilidad de éxito en la micorrización debido a la cantidad de esporas, fragmentos de raíces infectadas y restos de micelio que contienen. La principales desventajas del empleo de este tipo de inóculo son la posible presencia de patógenos que podrían causar infecciones no deseadas en el vivero así como el impacto ecológico que puede causasrse en la naturaleza como resultado de la recogida de la capa superior del suelo.
Objetivos
Preparación de sustratos para la síntesis -por propagación- de endomicorrizas (con suelo procedente de campo) y de ectomicorrizas (con suelo procedente del campo o con suelo estéril)
Recogida de suelo micorrícico
En el caso de que interese obtener endomicorrizas, es necesario recoger suelo de campo en zonas donde abunden hongos VAM. Los suelos sobre los que crecen las cistáceas (jarales) o gramíneas (pastizales de todo tipo) suelen ser los más adecuados. Si lo que pretendemos es obtener ectomicorrizas, las muestras de suelo deben recogerse en un bosque, preferentemente poco manejado y maduro. En ambos casos la toma de muestras se realiza en los primeros 5 cm de suelo; zona en la que se encuentra mayor concentración de inóculo. La recolección debe hacerse cuidadosamente sin remover grandes cantidades de suelo, y alternando distintos puntos de muestreo para no alterar el ecosistema. El suelo se deposita en sacos y se transporta al laboratorio donde será utilizado
Preparación del sustrato base
En todos los casos en que vayamos a preparar suelo para propagación de micorrizas es necesario utilizar un sustrato base de turba y vermiculita a partes iguales. La vermiculita es un mineral que absorbe agua y entre sus capas crecen bien los micelios de los hongos. La turba no debe llevar fertilizantes, ya que esto puede impedir la síntesis de micorrizas debido a que las plantas sólo van a micorrizar cuando necesitan determinados elementos que tiene dificultad para absorber del medio, bien por ser escasos o por impedimentos fisiológicos. La simbiosis con el hongo le permite captar esas sustancias con mayor eficacia. Si las plantas disponen de estos elementos en abundancia no necesitan micorrizar.
1.- Propagación de Endomicorrizas
Método. En el suelo traído del campo se siembran semillas de alguna gramínea (que crezca bien en condiciones de laboratorio). Cuando las plantas se han desarrollado lo suficiente (1 o 2 meses), se extraen del suelo, se les cortan las partes aéreas y se desechan. Las raíces se cortan en pequeños fragmentos y se mezclan bien con el suelo y todo ello con el sustrato base, a partes iguales: una parte de suelo de campo, una parte de turba y una de vermiculita. En este sustrato con inóculo podremos utilizarlo para hacer crecer las plantas que interese micorrizar.
2.- Propagación de Ectomicorrizas
Protocolo
a) Suelo del campo (lleva propágulos). Mezclar una parte de suelo de campo, una de turba y una de vermiculita y utilizar como sustrato para las plántulas que nos interese micorrizar. Obtendremos micorrizas formadas por diferentes especies de hongos (generalmente sin identificar).
b) Suelo estéril (hay que inocularlo en el laboratorio). Se mezcla una parte de turba y una de vermiculita en una bolsa de autoclave. Se esteriliza a 120º durante 20 minutos, y se utiliza para la síntesis controlada de micorrizas, inoculando el hongo con el que se quieran micorrizar las plántulas. En el suelo estéril se han eliminado todos los patógenos presentes en el sustrato así como los hongos no deseados. Pero es un proceso más costoso ya que se necesita mantener una colonia pura del hongo
Introducción
Excepcionalmente, puede ser interesante recurrir a las fuentes de inóculo existentes en la naturaleza. En suelos forestales crecen gran cantidad de hongos ectomicorrícicos, mientras que en pastizales, jarales... abundan las hongos endomicorrícicos. La utilización de “suelo de campo” como inóculo nos proporciona una elevada probabilidad de éxito en la micorrización debido a la cantidad de esporas, fragmentos de raíces infectadas y restos de micelio que contienen. La principales desventajas del empleo de este tipo de inóculo son la posible presencia de patógenos que podrían causar infecciones no deseadas en el vivero así como el impacto ecológico que puede causasrse en la naturaleza como resultado de la recogida de la capa superior del suelo.
Objetivos
Preparación de sustratos para la síntesis -por propagación- de endomicorrizas (con suelo procedente de campo) y de ectomicorrizas (con suelo procedente del campo o con suelo estéril)
Recogida de suelo micorrícico
En el caso de que interese obtener endomicorrizas, es necesario recoger suelo de campo en zonas donde abunden hongos VAM. Los suelos sobre los que crecen las cistáceas (jarales) o gramíneas (pastizales de todo tipo) suelen ser los más adecuados. Si lo que pretendemos es obtener ectomicorrizas, las muestras de suelo deben recogerse en un bosque, preferentemente poco manejado y maduro. En ambos casos la toma de muestras se realiza en los primeros 5 cm de suelo; zona en la que se encuentra mayor concentración de inóculo. La recolección debe hacerse cuidadosamente sin remover grandes cantidades de suelo, y alternando distintos puntos de muestreo para no alterar el ecosistema. El suelo se deposita en sacos y se transporta al laboratorio donde será utilizado
Preparación del sustrato base
En todos los casos en que vayamos a preparar suelo para propagación de micorrizas es necesario utilizar un sustrato base de turba y vermiculita a partes iguales. La vermiculita es un mineral que absorbe agua y entre sus capas crecen bien los micelios de los hongos. La turba no debe llevar fertilizantes, ya que esto puede impedir la síntesis de micorrizas debido a que las plantas sólo van a micorrizar cuando necesitan determinados elementos que tiene dificultad para absorber del medio, bien por ser escasos o por impedimentos fisiológicos. La simbiosis con el hongo le permite captar esas sustancias con mayor eficacia. Si las plantas disponen de estos elementos en abundancia no necesitan micorrizar.
1.- Propagación de Endomicorrizas
Método. En el suelo traído del campo se siembran semillas de alguna gramínea (que crezca bien en condiciones de laboratorio). Cuando las plantas se han desarrollado lo suficiente (1 o 2 meses), se extraen del suelo, se les cortan las partes aéreas y se desechan. Las raíces se cortan en pequeños fragmentos y se mezclan bien con el suelo y todo ello con el sustrato base, a partes iguales: una parte de suelo de campo, una parte de turba y una de vermiculita. En este sustrato con inóculo podremos utilizarlo para hacer crecer las plantas que interese micorrizar.
2.- Propagación de Ectomicorrizas
Protocolo
a) Suelo del campo (lleva propágulos). Mezclar una parte de suelo de campo, una de turba y una de vermiculita y utilizar como sustrato para las plántulas que nos interese micorrizar. Obtendremos micorrizas formadas por diferentes especies de hongos (generalmente sin identificar).
b) Suelo estéril (hay que inocularlo en el laboratorio). Se mezcla una parte de turba y una de vermiculita en una bolsa de autoclave. Se esteriliza a 120º durante 20 minutos, y se utiliza para la síntesis controlada de micorrizas, inoculando el hongo con el que se quieran micorrizar las plántulas. En el suelo estéril se han eliminado todos los patógenos presentes en el sustrato así como los hongos no deseados. Pero es un proceso más costoso ya que se necesita mantener una colonia pura del hongo
martes, 1 de junio de 2010
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